Por Carlos Manuel Bernal López 
Poco le importan a Vicente Sanabria los 51 años de edad que carga sobre una bicicleta, o las peripecias que un ciclista cubano debe sortear en pos del alto rendimiento; y eso lo ha dejado muy claro en la Vuelta Ciclística a Chiriquí.
Dueño de una forma física envidiable, este ilustre matancero entró quinto a la línea de meta durante la tercera etapa del reconocido evento que cada año tiene lugar en Panamá. De ese modo, optimizó su mejor ubicación, cuando en la primera etapa acabó octavo pese a intensos calambres que le imposibilitaron permanecer en el pelotón de escapada a pocos kilómetros del final.
En el más reciente esfuerzo, Vicente Sanabria venció los 82 mil 500 metros del exigente trazado, entre escaramuzas rivales y exigentes repechos. Así también subió en la clasificación general, hasta colocarse en un meritorio sexto lugar. Su puesto está a casi tres minutos del vencedor de la primera etapa, local y puntero en la clasificación David Díaz. Estos resultados lo colocan en escaños de privilegio en la clasificación por puntos, al situarse decimosegundo con once unidades.
Su performance tributa al destacado sexto escaño del equipo nacional cubano, en disputa con otros once elencos.
Los demás antillanos en liza han mostrado credenciales frente a ruteros de Colombia, Costa Rica, México, Estados Unidos y el país anfitrión. Los experimentados yumurinos Yariel de León y Joselín Piedra terminaron entre los 55 primeros de la última etapa disputada en la nación istmeña. Ahora descendieron hasta los peldaños 22 y 33 en ese orden.
Esta es la segunda incursión del ciclismo cubano en el país centroamericano durante los últimos meses. Recientemente intervinieron en la Vuelta a Panamá 2024, aunque allí los resultados fueron más discretos.