Desde 1977, el 29 de noviembre de cada año las Naciones Unidas conmemoran el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino.
Ese día, en 1947, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la resolución 181, la cual favorecía la creación de un Estado judío y un Estado árabe en Palestina, con Jerusalén como corpus separatum sometido a un régimen internacional especial.
A pesar de esa legislación, posteriormente conocida como la resolución de la partición, de los dos Estados previstos hasta el momento solo se ha creado uno: Israel.
Este Día brinda la oportunidad a la comunidad internacional de centrar su atención en que la cuestión de Palestina aún no se ha resuelto. Pero más allá de la fecha, las muestras de solidaridad mundialmente han expresado en las últimas semanas el apoyo al pueblo palestino.
Según destaca el propio organismo internacional, “En 1975 se estableció el Comité para el Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino, con el mandato de asesorar a la Asamblea sobre los programas destinados al ejercicio de los derechos inalienables del pueblo palestino, incluidos el de la libre determinación sin injerencia externa, el de la independencia y la soberanía nacionales, y el de regresar a sus hogares y propiedades, de los cuales fueron desalojados.”
Ese Comité es también responsable de «ofrecer su cooperación y apoyo a las organizaciones palestinas y otras organizaciones de la sociedad civil». Como resultado, se ha creado una red de más de mil organizaciones de la sociedad civil de todas las regiones del mundo que desarrollan actividades vinculadas a la situación de Palestina.
Hoy, el genocidio desatado por Israel sobre la población palestina, con mayor fuerza sobre la que se asienta en la Franja de Gaza, ha movilizado a la humanidad en favor de una comunidad prácticamente indefensa, en la que el principal objetivo a abatir son los niños.
Hoy, a la larga, será un día más de solidaridad, para condenar la injusticia.