El Grupo Mexicano Conjuro Teatro, con la presentación de la obra La Maga no soy yo al público unionense, retomó un personaje femenino de la novela Rayuela, de Julio Cortázar, para darle una visión actual al protagónico.

Bajo la dirección general de Dana Stella Aguilar Murrieta y la dramaturgia de Ulises Rodríguez Febles, el monólogo juega con dos realidades. Por un lado, interpreta el personaje de la novela, mientras que, por otro, a una madre soltera, migrante que busca mejores posibilidades para su hija y ella.

“En el texto se entremezcla y se cuestiona mucho a sí misma la protagonista, a Cortázar y a los hombres de la novela. Es una visión muy femenina que da voz a la mujer y a una situación tan compleja como es la migración, que en muchas partes del mundo es tan importante”, asegura Aguilar Murrieta.

La violencia, el maltrato, la discriminación, el abuso sexual, el feminicidio, la maternidad, dejan al descubierto los conflictos relacionados con la mujer en Latinoamérica.

Denise Castillo, la protagonista de la puesta en escena, con tan solo 18 años leyó la reconocida novela y desde ese entonces quedó enamorada del texto.  Para la actriz mexicana representa un reto esta obra dentro de su carrera.

“Como mujer resulta difícil decidir entre la familia, el trabajo, la vida. El personaje de La Maga constituye un sueño convertido en realidad, y al estudiar los textos pude aportar ideas a la obra”, comenta Denise.

Por segunda ocasión el destacado dramaturgo matancero trabaja con el Grupo Mexicano Conjuro Teatro para regalar a los apasionados del arte de las tablas lo mejor de la manifestación artística.

“De alguna manera es un homenaje a Cortázar.  La obra se basa en los presupuestos de la novela Rayuela, del destacado autor donde cuestiona al personaje, lo interroga, lo sitúa en los momentos actuales y destaca el papel de la mujer dentro de un sistema donde predomina el régimen patriarcal», detalló el dramaturgo.

La protagonista defiende su identidad frente al poder masculino y al mismo tiempo exhorta a las nuevas generaciones en Latinoamérica a combatir algunos tabúes que persisten en la sociedad actual.

Durante más de una hora el público presente en la Sala de teatro Pedro Vera de Unión de Reyes pudo observar los avatares de una mujer inmigrante en busca de la emancipación y libertad a pesar de los conflictos que refleja la puesta. (ALH)

 

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