Si bien el partido más dramático de ayer en la I Liga Élite de Beisbol tuvo de protagonistas a Ganaderos y Centrales, la noticia de la campaña estuvo en los predios holguineros del Calixto García.

Allí, en la cuarta fecha de la justa, Portuarios logró su primera victoria, y ya no quedan equipos sin triunfos, en una jornada que nos trajo el lamentable fallecimiento del otrora lanzador (y también buen bateador) Máximo García, quien brilló en las temporadas de las décadas de los 50 y los 60 del pasado siglo, en la pelota profesional de Cuba, México y Nicaragua.

García no solo fue un gran pelotero, sino un gran revolucionario. Dejó el beisbol profesional para contribuir al desarrollo de la pelota en los inicios de nuestras series nacionales, compartiendo sus labores como miembro de las filas del Ministerio del Interior, de las que siempre se sintió orgulloso. Es una sensible pérdida para el deporte nacional.

En el José Ramón Cepero avileño, Ganaderos vino a consumir su último turno al bate cuando perdía 3-1; sin embargo, una inefectiva labor del lanzador de Centrales, Eriel Carrillo, llevó a las bases a tres hombres, dos por pelotazos y uno por boleto, a lo cual se sumó un costoso error.

Con las bases llenas y ya debajo por una, el temible Raúl González fue golpeado por el primer envío de Carrillo, causante del empate. La escena quedó lista, entonces, para que Yordanis Samón impulsara la decisiva, con jit entre primera y segunda.

Adrián Sosa fue el responsable de cerrar la actuación de los pitchers de Portuarios, y se acreditó el juego salvado, ante unos Cafetaleros que perdían por 6-2 a la altura del séptimo, pero que exigieron a los de la agrupación de Mayabeque e Industriales al acercarse en el marcador 6-4.

En el Labra pinero, Agricultores tomó desquite, al deshacerse en el mismo primer inning y con un out de uno de los ases de Tabacaleros, Vladimir Baños.

Cinco jits en siete turnos, más un error, le dieron temprana ventaja de cuatro a los dirigidos por Carlos Martí. Pero el elenco occidental es de los que pelea duro, e igualó el choque en el cuarto.

Si se quedó corto en la pizarra final fue porque el derecho tunero Yasel Labrada tiró un excelente relevo de cuatro y un tercio, tolerando dos incogibles y una carrera inmerecida con un boleto y un ponche.

Transferencia a Iván Prieto, jugada de sacrificio, un wild y jit de Andrés de la Cruz construyeron la decisiva de Agricultores, que vio peligrar la victoria en la octava, cuando el propio De la Cruz falló dos veces consecutivas en la posibilidad del tercer out. Pero él mismo se encargó de quitarle el susto a sus compañeros, al fletar dos en la novena para abrir el desafío, y quitarle el invicto a Tabacaleros. (ALH)

/Granma

 

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