Por Anylisec Grau Boffill 
El obrero Maikel López Navarro describe lo sucedido en la chimenea de la Guiteras como un segundo en el que ladrillos y hollín lo sepultaron vivo.
«A mi me tocó el turno de la tarde con otros compañeros y estábamos sacando hollín y ladrillos y de momento lo único que escuché fue ¡cuidado!», explica adolorido.
En el Hospital Provincial Faustino Pérez de Matanzas recibieron las primeras atenciones los lesionados tras el accidente en la Central Termoeléctrica Antonio Guiteras.
«Tenemos hospitalizado a un paciente de 35 años reportado de estable y de cuidado con evolución favorable, le suministramos analgésicos y le aplicamos inmovilización», explicó la directora del hospital provincial matancero Taymí Martínez Naranjo.
Tras el colapso de una pared de 7 metros de la chimenea de la Central Termoeléctrica Antonio Guiteras el centro hospitalario matancero recibió a cuatro pacientes, dos con lesiones oculares leves y un paciente masculino de 30 años con trauma craneal simple y contusión en el miembro inferior derecho.
Maikel agradece estar vivo y a todos los matanceros que permanecen pendientes de su estado de salud y de sus compañeros.