José Martí  vivió un tiempo de su infancia en Caimito de Hanábana en el municipio matancero de Calimete. Allí conoció los horrores de la esclavitud  los cuales plasmó años más tardes en sus versos.

Este 19 de mayo cuando se cumple el aniversario 128 de su caída en Dos Ríos, los matanceros recordaron el pensamiento y acción del Maestro en pos de la libertad de Cuba.

En el acto, presidido por Ramón Gómez Medina, miembro del Buró Provincial del Partido en Matanzas se hizo entrega del carne a nuevos militantes de la organización política.

Además la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños entregó el sello José Ramírez Cruz por más de 20 años de entrega en el sector al campesino Anastasio Rosales González de la Cooperativa de Créditos y Servicios José Martí.

Desde el arte también llegó el homenaje al Apóstol con  el talento de jóvenes aficionados e integrantes de la Brigada de Instructores de Arte José Martí para recordar su impronta revolucionaria.

 

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