Por Yosier Argüeso Miranda 
Con solo 18 años y superando lesiones, el ciclista cubano Brian Guardado Pino ocupa el segundo lugar en la clasificación general júnior a dos etapas del final. Una hazaña que emociona a Jovellanos, Matanzas y a toda Cuba.
Vuelta a Chiriquí 2025
Mientras la carrera avanza entre las montañas chiricanas, un nombre suena con fuerza en las redes y en las calles de Jovellanos: Brian Guardado Pino. Con solo 18 años, este pedalista novel, formado en las pistas rudas de Matanzas, está a punto de escribir una de las páginas más brillantes del ciclismo juvenil cubano en el exterior.
La 45ª edición de la Vuelta a Chiriquí, competencia fundada en 1981 y avalada por la Federación Panameña de Ciclismo, se ha convertido en el escenario de su proeza. Brian, compitiendo en la categoría júnior, mantiene un sólido segundo lugar en la clasificación general, a solo dos etapas de que concluya una de las carreras más duras de la región.
Una lucha contra el dolor y los pronósticos
Lo que hace aún más meritoria la actuación de Guardado Pino son las circunstancias. En la segunda etapa, Brian sufrió una caída en el descenso hacia Tolé, con lesiones leves pero dolorosas en hombro y rodilla izquierda. A pesar de ello, no abandonó.
“Sigo con molestias, pero mi mente está en la meta. Represento a mi pueblo y a Cuba, eso me da fuerza”, declaró Brian a JIT Deportes tras la cuarta etapa.
¿Qué sigue?
Quedan dos etapas decisivas. Si Brian mantiene o mejora su posición, se convertiría en el primer ciclista juvenil cubano en subir al podio de la Vuelta a Chiriquí en más de una década.
Victoria anticipada
Brian Guardado Pino no es solo un ciclista: es un ejemplo de que con coraje y amor por los colores de la patria, se pueden superar obstáculos físicos y técnicos. Su historia ya es victoria.