«Voy a tratar ese tema [de Cuba] con Biden y ojalá se inicie lo más pronto posible, esto por razones fundamentalmente humanitarias«, afirmó en su conferencia de prensa Lopez Obrador al ser cuestionado sobre si abogaría por La Habana ante Washington.
«Objetivamente no creo que se tome esa decisión (de abrir el diálogo con Cuba) porque (Joe) Biden está muy beligerante financiando a Ucrania, está respaldando militar y políticamente a [el primer ministro de Israel, Benjamín] Netanyahu contra la comunidad palestina; entonces la actitud que tiene es (…) nada de negociador o pacifista, ni en la región latinoamericana y menos a Cuba, que lo tiene ubicado como un país que alienta el terrorismo, cosa que es totalmente equivocada», señala el también escritor en entrevista con Sputnik.
«Es casi improbable que quite [EEUU] el bloqueo a Cuba, pero sí por lo menos eliminar varias de las medidas que dejó el Gobierno de (Donald) Trump», sentencia en charla con este medio.
«La idea del presidente es justamente hablar con Biden para que se retomen las relaciones internacionales que se recuperaron con [Barack] Obama. Esa apertura de aquel entonces era la máxima que se había hecho y el interés es ese», agrega.
«[Puede] recurrir a las instancias multilaterales, está por ejemplo la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), ejercer un tipo de políticas de cooperación en la región; no solamente apoyo en términos de las votaciones en la Asamblea General de la ONU, sino un apoyo real en materia de solidaridad», explica.
Según Adalberto Santana, para que Cuba pueda liberarse del bloqueo comercial que lo aqueja desde hace más de seis décadas, «hay que cambiar la correlación de fuerzas (…). Los gobiernos de América Latina, como el de López Obrador, tienen buenas intenciones, pero la correlación de fuerzas no las tiene a su favor».
«En América Latina falta que se logre consolidar un bloque de fuerzas más homogéneo, particularmente con la llegada del presidente Lula a Brasil y del presidente Petro a Colombia (…) Que hagan alianza con México y podría ser un polo alternativo que pueda hacer mucho más viable para el Gobierno de Cuba entrar en una posible negociación de levantar el bloqueo por parte de Estados Unidos», agrega.
Las consecuencias de las sanciones
«Uno podría decir es abstracto, que te doy la cifra de los dólares y que no tienen una materialidad real en la población, pero sí la hay, está la falta de medicinas, la falta de materiales, la falta de útiles escolares en la población, la imposibilidad de que la isla haga comercio de una forma normal, porque a Cuba le ponen un impuesto y tienen que buscar las mil formas para poder comerciar con otros países, entonces este tipo de políticas por parte de Estados Unidos se traduce materialmente en imposibilidades para la población cubana», sentencia Aníbal García.
Un mundo multipolar que puede ayudar
«Hoy en día a nivel mundial hay una situación multipolar, ya no solo está en un solo bloque el poder, Washington; sino que han emergido a nivel internacional otros polos de poder, como China y Rusia», explica el experto.
A este factor, considera el analista, se suma la oleada de gobiernos que son considerados como progresistas y de tendencia de izquierda en América Latina, lo que podría fortalecer el vínculo de la isla con otras naciones latinoamericanas.
«(Socavar las relaciones entre México y Cuba) ha sido el interés de los Estados Unidos, pero hasta nuestros días no han podido, porque hay una fortaleza en la solidaridad y en la hermandad entre el pueblo de México y Cuba, y en general de todos los países latinoamericanos, y aunque cada vez más sea una política agresiva de Estados Unidos, Cuba hoy no vive aislada, sino vinculada a muchos países latinoamericanos», sentencia.
«Han sido relaciones ahora mucho más cercanas y de mucha cooperación. También creo que, en términos geopolíticos, el Gobierno mexicano con Andrés Manuel tiene un interés mucho más fuerte con el Caribe, que eso es algo que no se ha tenido desde hace muchas décadas», explica.