Entre los científicos extranjeros más renombrados que visitaron Matanzas en el siglo XIX estuvo el botánico estadounidense Charles Wright. Acerca de su obra en Cuba y en territorio yumurino trata esta reseña.

En Weathersfield, ciudad de Connecticutt, EE.UU., fue donde nació Charles Wright el 29 de octubre de 1811. Estudió en la Universidad de Yale. Más tarde se desempeñó como profesor en Ruttersville y Austin, Texas.

Desde 1849 participó en importantes expediciones científicas dirigidas al conocimiento de la flora norteamericana. También viajó por Madeira, Cabo Verde, Sudáfrica, Hong Kong y las islas Ogasawara, Japón, de 1853 a 1856. Después exploró el sur de Nicaragua. Colaboró con importantes botánicos de la época, como Asa Gray y George Bentham.

Entre 1856 y 1867 viajó a Cuba y exploró Matanzas, Pinar del Río y buena parte de Oriente. En esta expedición descubrió tres géneros y 178 especies de plantas nuevas para la ciencia. Formó además una amplia colección, que tenía cerca de 4 mil plantas cubanas herborizadas. Varios ejemplares colectados por Wright se conservan en los herbarios de Madrid, España y Leipzig, Alemania.

Los resultados de su labor fueron estudiados por el botánico alemán August Grisebach. Se publicaron en Plantae Wrightianae e Cuba orientali (1860-1862) y en Catalogus Plantarum Cubensium (1866). Las investigaciones que realizó permitieron la publicación de la obra Flora cubana (1873), por los botánicos Francisco A. Sauvalle y José Blaín. Esta se considera la monografía sistemática más importante sobre el tema impresa en Cuba durante el siglo XIX.

Durante la estancia en Matanzas también hizo aportes al conocimiento de los moluscos cubanos. En el potrero Palmasola y la desembocadura del río Camarioca, jurisdicción de Cárdenas, colectó 18 especies de caracoles. De ellas algunas nuevas para la ciencia, como la Cylindrella garciana. Sobre estos ejemplares publicó varias notas en la revista alemana Hojas malacozoológicas.

Sobre Wright expresó el matancero Manuel J. Presas en 1865: “El colector infatigable C. Wright es digno de toda consideración por su constancia en la recolección de vegetales, y últimamente de moluscos. Sus excursiones han dado brillantes productos a la ciencia”.

Como premio a la labor investigativa realizada, la Sección de Ciencias del Liceo de Matanzas lo eligió socio corresponsal el 26 de marzo de 1865. Fue colaborador de la revista Repertorio Físico-Natural de la Isla de Cuba, publicada en La Habana entre 1865 y 1868.

Wright salió de Cuba en 1867 y pasó a residir a Boston. Tras volver a su país, trabajó en el herbario de la Universidad de Cambridge, Massachusetts. Más tarde fue bibliotecario, entre 1875 y 1876, en el Instituto Bussey de la Universidad de Harvard. Falleció en su ciudad natal el 11 de agosto de 1885. (ALH)

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