Lleno de historia y tradición, el Museo municipal Juan Gualberto Gómez Ferrer, de Unión de Reyes, pese al decursar de los años se mantiene en pie. Convertida en una construcción civil para museo en 1982 por el decreto Ley No. 23, la casa data del año 1882.
Al momento de su apertura el 16 de abril de 1982, la casona atravesó una reparación que mantuvo la originalidad de la construcción. Una muestra del mes dedicada a la Central de Trabajadores de Cuba y tres salas dieron la bienvenida al público: la Sala de las Guerras Mambisas, la de la Ciudad y la de la Revolución.
Posteriormente se sumaron las salas Azucarera, de la República, de Juan Gualberto Gómez y de Regino Pedroso, dedicada al destacado poeta del proletariado cubano y nativo unionense.
Las salas de los patios interiores del museo son las únicas que permanecen montadas actualmente, luego de una restauración de casi todas sus piezas.
El museólogo Orlando Martínez Bernal explicó que originalmente constituían un juego de cinco pailas, cada una más pequeña que la anterior, y relató cómo la caña de azúcar pasaba de un caldero a otro mientras los esclavos la trabajaban. Una vez que la caña llegaba al último y más pequeño, el azúcar se encontraba debidamente concentrada.
La campana del centro posee una particular historia, comentó Henry García González, historiador del municipio Unión de Reyes.
“Le dicen la campana de Juan Ávila, pero es del ingenio Santa Rosa, propiedad de Miguel Aldama, casado con Rosa Alfonso. La familia Aldama, procedente de Galicia, España, llegó a Cuba en condición de inmigrante y comenzaron a trabajar para el isleño Gonzalo Luis Alfonso.
“Poco tiempo después de efectuarse el matrimonio entre ambos hijos, esta familia cosechó una gran riqueza, y llegó a poseer más de diez títulos de nobleza. Los Aldama, además, lograron posicionar su fortuna como la 34 más importante del país en su época, debido principalmente a su red de ingenios y los negocios en el ferrocarril”, explicó el Historiador.








Cuatro años atrás el Museo de Unión de Reyes cerró sus puertas al público debido, primero, a la pandemia de Covid-19, y por una reparación capital, la tercera desde su apertura. A diferencia de las anteriores, esta restauración violenta parte de la estructura original de la construcción.

Pese al paso del tiempo, el Museo municipal Juan Gualberto Gómez Ferrer permanece como un lugar emblemático debido a la historia que atesora en cada una de sus salas y piezas. Los habitantes del municipio Unión de Reyes esperan con ansias su reapertura, en especial el historiador Henry García González, quien lo denominara su tercer hijo. (ALH)

Excelente !!! Gracias al reportaje podemos comprender mas la historia local ,y lo tan necesarios que son mos museos municipales .