Catalogada como silente y muy peligrosa, la hipertensión arterial es la enfermedad no transmisible de mayor prevalencia a nivel mundial. De igual manera se comporta en Cuba y, particularmente, en Matanzas.
Se trata del aumento de la presión arterial de forma crónica. Un padecimiento que se muestra asintomático durante mucho tiempo, capaz de desencadenar complicaciones severas.
Entre otros males, puede ser la causa de cardiopatía isquémica, infarto de miocardio, trastornos cerebrovasculares e insuficiencia renal.
Pesquisas realizadas en el país revelan que nuestra provincia exhibe la mayor cifra de pacientes dispensarizados por el Médico de la Familia. Que 169 mil 415 personas de este territorio figuren en dicha categoría, significa que 37 de cada cien matanceros son hipertensos.
UN PADECIMIENTO QUE NO TIENE CURA
Las cifras son más elevadas si se tiene en cuenta a quienes portan la dolencia sin saberlo. Así lo confirma la doctora Elizabeth Oliva Correa, jefa del Departamento de enfermedades no transmisibles del Centro provincial de Higiene y Epidemiología.
Desde 1998, Cuba desarrolla un programa dirigido en específico a la hipertensión arterial, pues además de su actuación propia como enfermedad representa un factor de riesgo para otras, incluidas las principales causas de muerte en la nación.
Su objetivo fundamental radica en estabilizar a los diagnosticados, que su presión mínima (diastólica) esté por debajo de 90 y la máxima (sistólica) de 140. Ello evitará complicaciones.
Es un padecimiento para toda la vida, aunque vale precisar que una persona se declara hipertensa cuando luego de haberle tomado la presión en condiciones apropiadas en tres días, esta se muestra elevada.
La hipertensión arterial tiene origen desconocido en la mayoría de los casos y en un porcentaje muy reducido se debe a causas físicas. Y aunque casi no tiene cura, sí puede controlarse.
Seguir el tratamiento regular de por vida tendrá una repercusión favorable, mas la experiencia demuestra que no siempre sucede así.
Atenolol, Captopril, Clortalidona, Enalapril, Hidroclorotiazida, Metildopa y Nifedipino son los fármacos más empleados que, por supuesto, se indican según lo requiera el aquejado.
Muchas veces se descuida el ciclo, ya sea debido a rechazo por la aparición de determinados síntomas, o porque debido a la escasez de medicamentos por la que atraviesa el país, los pacientes intentan espaciar más las dosis para que no se les acaben los medicamentos.
Para solventar esta situación, explica la especialista, “se está llevando a cabo en Cienfuegos un ensayo clínico con un fármaco llamado Lisinopril, que alcanza dosis máxima en el organismo de 24 horas, diferente, por ejemplo, al Captopril, que solo dura por ocho horas, por lo que el paciente precisa tomar tres tabletas en un día”.
Las primeras consecuencias de la hipertensión arterial las sufren las arterias, las cuales endurecen a medida que soportan la presión arterial alta de forma continua, se hacen más gruesas y ello dificulta el paso de la sangre a través de las mismas. De ahí que con el avance de la edad el organismo sea más vulnerable.
Matanzas, argumenta la doctora, “es el territorio con cifras más elevadas de mortalidad por enfermedades cardiovasculares y entre los factores concomitantes que conllevan a ello figura la hipertensión arterial”.
De ahí que, añade, “estemos involucrados en la búsqueda activa de pacientes hipertensos en los centros de trabajo, en las comunidades, para lograr cambiar su estilo de vida”.
Resulta importante cumplir las medidas higiénico-dietéticas, entre ellas conservar el peso corporal adecuado, no fumar ni abusar del consumo de sal, no ingerir más de 15 mililitros de alcohol, realizar ejercicios físicos y mantener una alimentación saludable, así como asistir oportuna y sistemática al médico.
JORNADA PARA REFLEXIONAR
En 1677 se aludió por vez primera a la enfermedad, pero no fue hasta 1761 que Stephen Hales, químico y naturalista inglés, realizó una medición intravascular de la presión arterial.
Para ello introdujo una cápsula en la vena del cuello de un caballo, observó la altura alcanzada por la sangre en la misma y la fuerza que esta ejercía sobre la pared de la arteria.
Cincuenta años después, Poiseuille modificó el tubo de Hales simulando una V, y colocó mercurio en su interior. Luego en 1834, un médico francés diseñó un equipo en forma de columna, mas todas estas mediciones eran intrarteriales.
En 1836, Riva Rocci creó el manguito neumático para la compresión de la pared de la arteria, comenzando así la toma de la tensión arterial a determinados pacientes. Desde la primera década del siglo pasado esta medición se convierte en parte integral del examen físico del paciente.
El 17 de mayo se celebra cada año el Día Mundial de la Hipertensión Arterial y a raíz de la fecha cada municipio del territorio matancero desarrolla un programa de actividades dirigido, en lo fundamental, a la divulgación sobre la enfermedad.
Matanzas fue la primera provincia en iniciar acciones científicas, educativas y de prevención en la Jornada por el Día Mundial de la Hipertensión Arterial#Prosalud pic.twitter.com/nCHlrSN21O
— Prosalud Cuba (@CubaUpp) May 16, 2023
Se trata de acciones de información y educación en espacios públicos, centros asistenciales y laborales, a la vez que se efectúan pesquisas masivas y toma de tensión arterial a usuarios de las instituciones de Salud y trabajadores. También se ejecutan jornadas científicas y conferencias con especialistas.
Precisa Oliva Correa que en esta ocasión las actividades centrales en el municipio yumurino tendrán lugar en el policlínico Carlos Verdugo, de la barriada neopoblana. (ALH)