Por Carlos Manuel Bernal López 
La Central Termoeléctrica Antonio Guiteras cumple 36 años de fundada en medio de un proceso de reparaciones que busca alargar su tiempo de vida útil y rescatar potencias de antaño.
El mayor bloque de generación unitario de la Isla cumple la responsabilidad de generar corriente eléctrica a partir del crudo nacional, algo que parecía quimera el 19 de marzo de 1988 cuando el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz inauguró la central.
En más de tres décadas y media, la unidad térmica matancera preserva el reto de la estabilidad desde el aporte al Sistema Electroenergético Nacional. Sus trabajadores descansan poco con el afán desvelado de que en los hogares se haga la luz.
Los complejos escenarios económicos o las crisis de materias primas para las costosas y millonarias rehabilitaciones tampoco amilanan a la tropa de la Central Termoeléctrica Antonio Guiteras, la cual ha cambiado desde su creación, pero preserva el acometido de la generación eléctrica y la contribución a la nación.
Una gran termoeléctrica que con los años de explotación se mantiene de pie gracias a esos hombres que ponen su emimpeño para que se mantenga en forma