La antorcha olímpica estará protegida por la Policía durante su recorrido por Francia, de Marsella a París, aseguró Gerald Darmanin, ministro de Interior, en una conferencia de prensa.

Una «burbuja» de seguridad, integrada por cien policías y gendarmes, seguirá a la llama antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos. Entre los hombres responsabilizados con garantizar esa seguridad estarán los de la unidad élite, y otros 18 uniformados –como civiles– asumirán la protección cercana a los portadores del fuego.

Una unidad de fuerza móvil, compuesta por cien agentes, situados por delante y detrás del convoy, se encargará también de luchar «contra cualquier forma de desorden público», apuntó el Ministro. El relevo comenzará en Marsella, el 8 de mayo, y finalizará el 26 de julio, en la apertura del evento.

«Cien lugares emblemáticos, más de 400 localidades, cinco territorios de ultramar y 65 sitios visitados cerrarán cada jornada diaria», detalló Darmanin. En la llegada a Marsella esperan a unas 15 000 personas, para lo cual movilizarán a 5 000 efectivos, y en París habrá 1 600 policías y gendarmes. Agregó que la custodia de la antorcha le costará a su Ministerio un millón de euros.

/ Granma

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *