Francia elevó el 24 de marzo al máximo el nivel de vigilancia por terrorismo, al orden de la “urgencia atentado”, tras el letal ataque en el teatro Crocus City Hall de las afueras de Moscú, reclamado por una facción del Estado Islámico, por los que abundan las teorías sobre la posibilidad de un cambio en la inauguración, con el Stade de France como un escenario citado.
De acuerdo con Oudéa-Castera, que no se hable del tema desde el gobierno no quiere decir que se dejen de considerar alternativas.
La intención del país es organizar una ceremonia inaugural inédita, con unos 300 mil espectadores, en torno al Sena, cuyas márgenes fueron declaradas por la Unesco en 1991 Patrimonio de la Humanidad.
Para ese magnífico acto nos preparamos con mucho empeño y pasión, pero como nos pidió el presidente Emmanuel Macron y los franceses esperan, seremos previsores, insistió.
Según la ministra de Deportes, no existe una amenaza de terrorismo específica de cara a los Juegos Olímpicos, cita bajo los cinco aros que la capital francesa acogerá por tercera vez en su historia, después de las ediciones de 1900 y 1924.
Esta amenaza la seguimos con la vigilancia necesaria, sin que se conozca hoy un plan terrorista específico contra los Juegos, dijo. (ALH)