Por Ana Valdés Portillo 
La rumba, Patrimonio de la Humanidad tiene en la agrupación Los Muñequitos de Matanzas a uno de sus mejores intérpretes y cultores. Este 9 de octubre arriban al aniversario 70 de su fundación ocurrida en el barrio La Marina en la ciudad de Matanzas.
Siete décadas de labor ininterrumpida en favor de la rumba cubana tienen Los Muñequitos de Matanzas y lo festejarán este sábado 8 de octubre en la casa social de la UNEAC durante el encuentro mensual titulado: La rumba soy yo.
Cuando en el pasado siglo un grupo de amigos se reunieron para tocar la música afro que se les ocurrían quizás no pensaron que 70 años después sus coterráneos del barrio la Marina amarían todo lo logrado por este colectivo derivado en Los Muñequitos de Matanzas por la popularidad alcanzada por una de sus composiciones.
Su nombre original era Guaguancó Matancero.
Desde hace más de 50 años su director es Diosdado Ramos Cruz quien, con sólo 4 de edad, los conoce por la relación que su abuela tenía con uno de esos músicos. Ellos se consideran una familia y se preocupan por dejar una herencia digna del prestigio nacional e internacional que han logrado. Por eso Figurín hijo de Diosdado con igual nombre y primer apellido, creó el grupo Rumba Timba y una academia de música y danza folclórica que transmite los valores y legado musical de sus ancestros a los niños y jóvenes del barrio.
Los Muñequitos de Matanzas pasean la rumba por toda Cuba y países de varios continentes. Y aunque pudieran parecer viejos por su cumpleaños 70, piensan en el futuro de la rumba y preparan su relevo.
Este festejo es grande y el grupo afroperuano Perkutao, surgido en 2006, decidió asistir para compartir con uno de sus ancestros.
La rumba, surge en Cuba en el siglo XIX por sus raíces africanas. Es considerada madre de otros ritmos y bailes latinos diseminados por el mundo.
La rumba llama y como dice Nicolas Guillén en el sóngoro cosongo: «Aquí el que más fino sea, Responde si llamo yo».