El Gobierno de Trump ha suspendido los intentos de encarcelar a personas inmigrantes en campamentos situados en la bahía de Guantánamo debido a que teme que las instalaciones improvisadas no cumplan con los estándares básicos de detención.
Funcionarios del Gobierno de Trump habían planeado construir tiendas de campaña para albergar a unos 30.000 inmigrantes detenidos en la frontera entre Estados Unidos y México.

Mientras tanto, Pete Hegseth viajó este martes a Guantánamo, su primera visita a esa base militar estadounidense desde que fue confirmado como secretario de Defensa de Estados Unidos. Hegseth estuvo anteriormente destinado en Guantánamo, donde sirvió en la Guardia Nacional del Ejército.

En más noticias sobre inmigración, el Gobierno de Trump ha ordenado al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos que localice y deporte a cientos de miles de niños y niñas inmigrantes que llegaron a Estados Unidos sin sus padres. Por lo general, los menores de edad que emigran a Estados Unidos sin la compañía de sus padres quedan bajo la custodia del Departamento de Salud y Servicios Humanos y de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados.

Dado que estas dos oficinas están actualmente supervisadas por Robert F. Kennedy Jr., activistas por los derechos humanos temen que se intensifiquen las violaciones a los derechos de las personas migrantes.

La falta de transparencia en lo que respecta a las prácticas de los soldados, sumado a la política de ampliar la detención de migrantes en un lugar de alta seguridad como Guantánamo, hace que surjan dudas acerca de las condiciones en las que funciona actualmente la instalación e incluso sobre el número exacto de personas que han estado encarceladas allí. (ALH)

Tomado de Cubadebate

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *