Hace 135 años los médicos cubanos, entre ellos varios matanceros, se reunieron para debatir temas científicos en el Primer Congreso Médico Regional de la Isla de Cuba.
El 15 de enero de 1890 se inauguró en La Habana el Primer Congreso Médico Regional de la Isla de Cuba. Fue el primer evento nacional relacionado con las Ciencias médicas que recoge la historia del país.
Lo convocó en 1888 la Sociedad de Estudios Clínicos de La Habana, fundada en 1879. Sesionó hasta el 22 de enero 1890 en la sede de la Real Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana. Participaron 197 médicos, de ellos 130 de la capital, 64 de otras localidades cubanas, dos desde Francia y uno desde los Estados Unidos.
En el programa previo se especificó que se podían exponer “Comunicaciones” y “Presentaciones” en 25 temas diferentes. De estos, cuatro estaban relacionados con la fiebre amarilla, principal problema de la salud pública cubana en ese momento. Las formas de presentación podían ser diversas: “Impresos”, “Instrumentos”, “Piezas anatomo-patológicas”, “Preparaciones histológicas” y “Productos farmacéuticos”. También podían ser mostrados pacientes, “para demostrar la eficacia de tratamientos médicos quirúrgicos”.
El Presidente de la Comisión Organizadora del Primer Congreso Médico Regional de la Isla de Cuba fue el médico matancero, residente en la capital, Juan Santos Fernández. Como presidente del evento fue designado el doctor Francisco Zayas Jiménez, también muy vinculado a Matanzas, aunque nacido en Pipián.
El Doctor Juan Santos Fernández, quien se destacó por una prolífica producción científica, presentó varios trabajos en la cita, todos vinculados a la Oftalmología. Entre ellos “Estudios sobre la catarata”, “Pérdida de la vista por herida de bala” y “Autoplastia, párpado inferior”. Otras de sus comunicaciones al Congreso fueron “Método operatorio del chalaeion”, “Ciegos de nacimiento” y “Conjuntivitis catarral convertida en purulenta”.
El también matancero Tomás Vicente Coronado, expuso las ponencias “Estadística de una localidad de Vuelta Abajo” y “Dermatophilus penetrans”, donde abordó aspectos médicos en relación con el insecto comúnmente llamado “nigua”. Además, disertó sobre el paludismo con las reseñas: “Consideraciones sobre el diagnóstico pronóstico de los intoxicados por el paludismo”, “Apreciaciones sobre el tratamiento de los palúdicos”, “Paludismo. Naturaleza del agente infeccioso” y “Formas anormales del paludismo en Cuba”.
Otros relevantes galenos matanceros que estuvieron presentes en el Primer Congreso Médico Regional de la Isla de Cuba, fueron Gabriel Casuso, José Ignacio Torralbas, Ignacio Plasencia y Juan Nicolás Dávalos. El primero presentó “Un caso de eclampsia”, mientras el segundo expuso unas “Consideraciones sobre la difteria y el croup”. Plasencia disertó a cerca“Del tratamiento del Hidrocéle por el ácido fénico diluido”. Mientras tanto, Dávalos demostró el “Aumento de la virulencia del microbio del muermo por la temperatura media del país”, y, junto al habanero Enrique Portuondo, llamó la atención con un “Análisis bacteriológico de las aguas del Canal de Albear”.
Desde Matanzas, presentaron experiencias el médico Domingo L. Madan, al tratar acerca de la “Conjuntivitis edematosa, dependiente de la arterioesclerosis”. También lo hizo Justo Verdugo, quien mostró el “Ligador de arterias en los casos de aneurismas de los miembros”.
Los cardenenses Alejandro Neyra y Fernando Méndez Capote mostraron el avance de las ciencias médicas en la Perla del Norte. El primero comentó sobre la “Albuminuria de los primeros meses del embarazo”, mientras el segundo dio a conocer una “Estadística demográfica de la ciudad de Cárdenas, durante un período de seis años”.
Otros matanceros, en este caso desde Francia, también enviaron ponencias al Primer Congreso Médico Regional de la Isla de Cuba. Lo hicieron el destacado odontólogo Oscar Amoedo con “La cocaína. Su acción fisiológica terapéutica. Crítica de las observaciones publicadas”, y el urólogo Enrique Lluria con “Asepsia y antisepsia de las vías urinarias”.
Además de los mencionados, se inscribieron en el evento otros galenos yumurinos. De la ciudad cabecera estuvieron Antonio Zanetti, Julio Ortiz Coffigny, Antonio Font Cuesta, Manuel Zambrana Navia, Ricardo García, Adolfo Lecuona y Eduardo Díaz. De Unión de Reyes estuvo Regino Lima, de Macuriges Eduardo Baró y de Coliseo Juan Soto. Otros facultativos de Cárdenas que participaron fueron Daniel Gutiérrez, Francisco Barrinat y Luis Ros. Los representantes de Colón y El Roque, fueron Rafael Cárdenas y Vidal Junco, respectivamente.
Las ponencias presentadas y las discusiones que suscitaron quedaron recogidas en un libro que se publicó en el propio año 1990. También aparecen los nombres de todos los participantes, así como los discursos pronunciados en las sesiones inaugural y de clausura.
El discurso de clausura del Primer Congreso Médico Regional de la Isla de Cuba fue leído por el Presidente, Doctor Francisco Zayas. En él reconoció el valor del evento para la independencia científica de la medicina cubana:
“Ya, desde esta fecha, dejará de ser nuestra isla, por estos actos de reflexión de su propia masa pensadora, como ha sido hasta aquí, obscuro satélite, gravitando obligado en las órbitas de lejanos astros”.
Al despedirse de los participantes, exclamó:
“(…) Diré a esos compañeros que han venido de largas distancias, estimulados por el deseo tan noble de saber, contribuir con sus talentos al adelanto de la ciencia al bienestar de su patria, que yo los saludo en nombre de todos, dándoles la más cordial despedida, que lleven dentro de su pecho, al regreso al hogar, el recuerdo de nuestra cariñosa simpatía, el caudal acrecentado de su dignidad, por el esfuerzo realizado, nuestros votos más sinceros por su prosperidad”. (LLOLL)