El estadio Victoria de Girón se alza inmenso ante los ojos de matanceros y visitantes. El coloso yumurino, construido gracias a la movilización y el sostenido esfuerzo realizado por las masas, desde 1992 funge como sede del equipo de béisbol del territorio: Los Cocodrilos de Matanzas.
Inaugurado el 20 de febrero de 1977, con la presencia del líder de la Revolución, Fidel Castro Ruz, arriba, hoy, a sus 47 años de fundado.
En la jornada de apertura tuvo lugar el enfrentamiento de los equipos de Matanzas y La Habana, encuentro que dejaba inaugurada la segunda serie selectiva del béisbol cubano. El certero pitcheo combinado de Eladio Iglesias y Ramón Villabrille, por la selección habanera, y las dificultades defensivas de los matanceros, quienes cometieron cinco errores, decidieron la victoria de los primeros, 5 anotaciones por 1.
Como datos significativos del histórico encuentro se incluyen el empleo por primera vez en nuestras series del bate de aluminio y su transmisión televisiva a color para toda la nación.
La instalación deportiva, otrora sede de los equipos Henequeneros y Citricultores desde finales de la década del 70, así como en el 80 y el 90 del pasado siglo, también fue el cuartel general del club Matanzas en la Serie Selectiva y luego home alternativo de Occidentales.
El estadio Victoria de Girón durante estos años ha sido escenario de innumerables marcas del béisbol nacional, entre las que se destacan los mil y dos mil jits bateados por Wilfredo Sánchez, los 400 jonrones de Lázaro Junco, los 234 éxitos del zurdo de oro, Jorge Luis Valdés, y el juego más extenso de 24 entradas entre Habana y Matanzas en 1993.
El Palacio de los Cocodrilos cuenta con capacidad para más de 25 mil personas. Resulta el segundo estadio de béisbol más grande del país, tras el Latinoamericano de La Habana. (ALH)