Dentro de una especialidad pródiga de excelentes marcas y excepcionales exponentes a lo largo de la historia del atletismo cubano, el saltador de longitud matancero Aniel Molina busca asentarse entre los mejores del país a partir del apoyo de una reconocida marca internacional.

Resulta que la empresa alemana PUMA patrocina a un grupo de talentos de esta especialidad atlética en la Mayor de las Antillas. Entre los seleccionados está Molina, oriundo del municipio Limonar.

Molina durante una de las jornadas de entrenamiento en la escuela nacional de atletismo, en La Habana. Foto: Tomada de Facebook.

Este proyecto, aunque es un hecho hace ya varios años, tiene objetivos a mediano y largo plazos, con vista, sobre todo, en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. La marca, que patrocina además a la Federación Cubana de Atletismo, costea a los deportistas una serie de requerimientos monetarios y de recursos claves para el desarrollo competitivo. Aunque en inicio, la idea surgió con sólo dos atletas, una reestructuración motivó la actual forma global, permitiendo a más talentos acceder a los medios que potencien su progreso.

Saltador matancero engrosa delegación en Portugal

Recientemente, cinco de los diez integrantes con que cuenta hoy el equipo nacional cubano de salto de longitud salieron hacia Portugal, incluido el saltamontes yumurino. Junto a los entrenadores Daniel Osorio e Iván Izaguirre como principales referentes, los bisoños perfeccionan rutinas de entrenamiento y técnicas en aras de futuros compromisos.

Un grupo de saltadores cubanos partió hacia Portugal con el fin de cumplimentar entrenamientos y preparación dentro del patrocinio de la marca alemana. Foto: Vía Facebook.

Según el profesor Osorio, Molina exhibe un somatotipo fenomenal para la práctica del salto largo, a lo cual se suma su gran velocidad, un factor determinante en dicha disciplina del deporte rey. Esto, junto a su fuerza en el despegue, es de los mejores atributos que muestra, pese a tener menos tiempo de práctica que sus coequiperos Maikel Vidal y Alejandro Parada.

Dicho trío conforma la avanzada criolla en suelo lusitano, al igual que el medallista de bronce olímpico Maykel Massó y la única fémina de la comitiva, la habanera Hayla González Herrera. De ellos, lo más llamativo desde Europa ha resultado la rehabilitación de Massó, quien sufrió una severa lesión en 2023.

Tanto para Molina como el resto de los saltadores, el proyecto ya rinde frutos. Si bien, la ruta de esta colaboración pretende un sendero hacia el próximo ciclo olímpico, la inminente cita de París 2024 pudiese devenir la primera ventana. Con tope clasificatorio mínimo de 8.27 metros, World Athetics exige su cumplimiento antes del 30 de junio del presente año para certificar el pase a la capital francesa. El veinteañero Aniel presenta un registro personal de 7.95 metros.

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