La Tierra tendrá un visitante dentro de su órbita durante las próximas décadas: Un asteroide llamado 2025 PN7 se ha convertido en una «cuasi luna» para la Tierra, y compartirá una órbita con nuestro planeta hasta 2083. Lo reveló un grupo de astrónomos en un artículo publicado en IOP Science.

Las cuasilunas no son lunas reales y en realidad no orbitan la Tierra, aunque a veces parecen hacerlo durante períodos cortos de tiempo, dijo Phil Nicholson, profesor de astronomía en la Universidad de Cornell de Nueva York, a ABC News.

En cambio, orbitan el sol, como asteroides típicos, en caminos que son «muy similares» a los de la Tierra.

«Como resultado, a veces ‘hacen compañía’ a la Tierra durante años, o incluso décadas», dijo Nicholson. «Piensa en un lobo que sigue el campamento de una banda de cazadores prehistóricos, en busca de restos, pero en realidad no se convierte en parte de su banda y finalmente se va».

El asteroide se considera una cuasi-luna porque «solo parece que está dando la vuelta a la Tierra desde nuestro punto de vista», dijo Zoe Ponterio, gerente de la Instalación de Imagen Planetaria de Naves Espaciales de la Universidad de Cornell, a ABC News.

Su órbita es ovalada, por lo que a veces está más cerca del Sol que la Tierra, mientras que a veces está más lejos, dijo Ponterio. Cuando está más cerca del sol, va más rápido que la Tierra, y cuando está más lejos, se mueve más lento que la Tierra, lo que contribuye a que el objeto se vea como si estuviera orbitando el planeta desde nuestro punto de vista, agregó Ponterio.

«Con la Tierra y la cuasi-luna turnándose para pasarse, la cuasi-luna parece moverse a nuestro alrededor», dijo el astrónomo.

La órbita de la cuasi-luna seguirá cambiando, eventualmente a una órbita de herradura. Explicó, que parecerá estar balanceándose hacia adelante y hacia atrás a través del cielo a medida que pasa la Tierra.

El objeto fue descubierto después de que el telescopio Pan-STARRS en el Observatorio Haleakala de Hawái le tomara imágenes por primera vez el 29 de agosto, dijeron los investigadores. Sin embargo, datos más antiguos indican que la cuasi-luna ha estado en órbita durante seis décadas.

Las cuasi-lunas suelen ser bastante pequeñas y no visibles sin un telescopio, dijo Nicholson.

Se han registrado otras seis lunas parciales, temporales o cuasi-lunas cerca de la Tierra, según astrofísicos de la Universidad Northeastern.

Tomado de CubaSí

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