Recordar la obra de la poetisa, periodista e historiadora matancera Delia Carrera Torres es un acto de justicia histórica.
Delia María de la Encarnación Carrera Torres está entre las hijas ilustres de Jovellanos, lugar donde nació el 25 de marzo de 1906. A los dos años quedó huérfana de madre. Tiempo después diría sobre su mamá: “Ella es algo así como una cosa que soñé”.
Comenzó los primeros estudios en 1914 en el Colegio Patria y después los continuó en una escuela religiosa. Al mismo tiempo fue alumna de la Academia Orbón, donde se graduó como profesora de Piano y Solfeo en 1926. Muy joven conoció al maestro español Francisco Ramón del Pueyo, quien tuvo gran importancia en su vida. En la revista Violetas, creada por este educador, publicó sus primeros escritos.
Delia Carrera Torres cursó el bachillerato de 1922 a 1926 en el Instituto de Segunda Enseñanza de Matanzas. En esta relevante institución fue discípula de figuras como Domingo Russinyol y Gonzalo Cuní. Después ingresó en la Universidad de La Habana. En 1929 se graduó de Doctora en Filosofía y Letras, con una tesis sobre el poeta matancero Bonifacio Byrne. Un año después, en 1930, alcanzó el título de Doctora en Pedagogía.

Comenzó a laborar en Jovellanos como maestra sustituta en 1931. De 1933 a 1935 fue profesora de la Cátedra de Geografía e Historia de la Escuela Normal para Maestros de Matanzas, en sustitución de Sarah Isalgué. Más tarde ocupó la plaza de profesora de Geografía, Historia y Cívica en la Escuela Primaria Superior Julio B. Moreno. En este lugar trabajó por más de 25 años.
Desarrolló una vida intelectual muy activa. Fue fundadora, secretaria y presidenta de la Peña Literaria de Matanzas. En este contexto propuso en 1943 celebrar el Día del Poeta el 3 de marzo, fecha del natalicio de Bonifacio Byrne. Un año después se estableció esta tradición, que fue oficialmente aprobada por el gobierno en 1953.
Formó parte de numerosas instituciones culturales. Entre ellas el Ateneo de Matanzas y la Asociación Amigos de la Cultura Cubana. También integró la Asociación de Maestros Católicos y el Colegio Municipal de Pedagogos de Matanzas.
Colaboró como periodista en El Debate, El Comercio y El Mundo. Fue secretaria de la Asociación de Prensa de Jovellanos. En su pueblo natal fue subdirectora del semanario Opiniones, donde escribió entre 1948 y 1955. En 1948 fue premiada por la emisora CMQ.
Animada por esta labor previa, se graduó como periodista profesional en 1951, en la Escuela Profesional de Periodismo Manuel Márquez Sterling, en La Habana. Esto posibilitó en que 1954 comenzara a impartir Geografía General y de Cuba en la Escuela Profesional de Periodismo Fernando Lles Berdayes, en Matanzas.
Escribió poemas, la mayoría aún inéditos. Nunca fueron compilados en un libro durante su vida. El poeta Agustín Acosta resaltó la “…fuerza evocadora de sus versos”.
Como historiadora hay que destacar la publicación del libro Bonifacio Byrne. Breves datos sobre la vida y obra del poeta nacional. Participó en el IV Congreso Nacional de Historia (1945), con un trabajo sobre Domingo Mujica Carratalá. En las conclusiones de este evento fue resaltado el aporte de Delia Carrera Torres al estudio de esta personalidad:
“(…)se destaca la figura heroica del cubano integérrimo que se llamó Domingo Mujica y Carratalá, preclaro hijo de Jovellanos y primer mártir matancero de la Revolución del 95, quien, impulsado por su ideal nobilísimo, se levantara en El Realengo con recursos extremadamente limitados y que supo ofrecer su vida joven, fuerte y animosa en la conquista de la independencia, la mañana del 20 de agosto de 1895.»
Dentro de la obra de Delia Carrera Torres sobresale su condición de periodista en el diario matancero El Republicano. Entre 1945 y 1960 tuvo la responsabilidad de escribir las secciones “En el Umbral” y “¿Recuerda Usted?”, donde destacó aspectos pedagógicos e históricos, así como hechos de actualidad ocurridos en Matanzas.
De la primera de estas secciones hay que mencionar las que dedicó a la casa de Domingo del Monte y a los avances de la Educación Física en el mundo. También escribió acerca de los Congresos Nacionales de Historia y la figura de Alfredo Miguel Aguayo. En fecha tan temprana como 1946 valoró las ventajas de la televisión para el país.
Entre los temas que abordó estuvieron la vida y obra del médico Ricardo Núñez Portuondo. Escribió además sobre el Día del Médico, la relación entre el arte y la ciencia y el nuevo Centro Médico de Matanzas. Elogió a matanceros relevantes como Hortensia Lamar, Salvador Salazar y Luis Cuní.
En la sección “¿Recuerda Usted?” hizo alusión, entre varias temáticas, a los libros del médico Mario E. Dihigo. Otras figuras que homenajeó fueron el historiador José A. Teserra, el maestro José Russinyol y los doctores Alfredo Esquerré y Gonzalo Cuní.
Tras una vida dedicada a la cultura matancera, Delia Carrera Torres falleció el 24 de febrero de 1986, debido a las secuelas de un accidente sufrido meses antes. En esos momentos estaba casi olvidada. Años después el historiador Raúl Ruiz comenzó el camino para otorgarle a Delia Carrera Torres la justicia histórica que merece. (ALH)