Un análisis del Instituto Nacional de Estadísticas (Istat), publicado en el sitio digital del diario La Stampa, apunta que la actual cifra de personas con más de cien años residentes en este país representa un incremento del 130 por ciento respecto a las poco más de 10 mil que se contabilizaban en 2009.
De acuerdo con los últimos datos, 724 personas mayores han cumplido al menos 105 años, y se consideran en el grupo de semisupercentenarios, con un aumento de casi el 10 por ciento con respecto a las 654 del año anterior, y casi todas son mujeres, con 90,7 puntos porcentuales del total.
En cuanto a los supercentenarios, que superan los 110 años, 18 de los 19 existentes en el país son mujeres y la más longeva, residente en la sureña región de Campania, cumplirá 115 años el próximo 20 de noviembre.
La región del país con mayor tasa de longevidad es Molise, con 61 centenarios por cada 100 mil habitantes, seguida de Liguria, Friuli-Venecia Julia y Toscana con 59,4; 55,4 y 49,1 personas con más de cien años por tal cantidad de residentes.
Como dato significativo, el estudio del Istat muestra que existe un punto en el que la curva de mortalidad deja de ascender, pues a partir de los 115 años la probabilidad de muerte es del 48 por ciento, y se mantiene por debajo de los 60 puntos porcentuales hasta el 112 cumpleaños.
Solo a los 115 años alcanza su punto máximo, del 67 por ciento, por lo que los expertos hablan de una meseta de mortalidad, zona estable donde el riesgo ya no aumenta, y consideran que quienes entran en ese rango superan un filtro biológico selectivo, combinación de genética, entorno, suerte y resiliencia individual, que los protege.
Otro dato interesante es que el 91 por ciento de los supercentenarios aún viven con sus familias, en sus propios hogares o en el de un hijo, lo que les ayuda psicológicamente, al contar con el apoyo de una atención más personalizada y esmerada, con las mismas costumbres, como última línea de defensa para la supervivencia.
Sin embargo, el hecho de que tan elevado por ciento de supercentenarios aún vivan en casas suele deberse también a la necesidad, pues en Italia aún existe carencia de instalaciones necesarias, alternativas, apoyo financiero y una visión pública del envejecimiento, agrega la fuente. (ALH)
