Celebramos a Matanzas en su aniversario 332. Fundada en 1693 como villa colonial en la costa norte de la isla, creció gracias a su puerto, a la confluencia de ríos y a la actividad productiva que la convirtió, con el tiempo, en un punto clave de intercambio, cultura y trabajo. Su historia es la de una ciudad que se ha ido tejiendo entre puentes, embarcaderos y estaciones —espacios donde se encuentran gentes, mercancías e historias— y que ha sabido reinventarse sin perder su sello.
El transporte ha sido y sigue siendo columna vertebral de esa identidad. Matanzas no solo conecta barrios y municipios: enlaza la producción con el puerto, facilita el acceso a servicios y sostiene la vida cotidiana de miles de familias. Por eso, recuperar y mantener carreteras, vías férreas, terminales y servicios urbanos es, en la práctica, cuidar la ciudad misma.
Hoy, en lo operativo, avanzamos en acciones concretas para reforzar esa conectividad: se trabaja en la reparación por etapas de la Terminal de Ómnibus, para devolver cuanto antes espacios seguros y funcionales; se ha iniciado la intervención del puente ferroviario sobre el río San Juan, con medidas ambientales para proteger el río durante las labores; se mantiene la ejecución de mantenimientos en objetivos de la red férrea y tareas puntuales para garantizar la circulación segura; y se continúa desplegando y supervisando las soluciones de movilidad urbana, como los triciclos eléctricos, que hoy sirven a barrios de la provincia.
Todas estas obras, y otras acciones en proyecto, se ejecutan con el propósito de recuperar prestaciones, mejorar la experiencia del viaje y proteger la integridad de las infraestructuras, conscientes de que se requiere mucho más, de que son grandes las carencias en los servicios de transporte y también el esfuerzo de sus trabajadores, y de que debemos ir a una mayor velocidad en la recuperación de la transportación pública de pasajeros en la ciudad. Ese es el propósito.
Los matanceros son el pilar fundamental de la ciudad. Quienes trabajan en el sector del transporte logran mantener a Matanzas en movimiento.
Hoy, 332 años después de fundada aquella villa colonial, Matanzas es una ciudad diferente. Que las vías sean siempre caminos de encuentro, que cada ómnibus y cada tren lleven historias de regreso a casa, y que el esfuerzo colectivo que hoy vemos las obras y en los talleres se traduzca mañana en calles más seguras, estaciones más cómodas y viajes que reconforten.
¡Feliz aniversario, Matanzas —tu movimiento es nuestro compromiso!
Foto Naturaleza Secreta
Por: Eduardo Rodríguez Dávila